El lenguaje arquitectónico empleado en este teatro y centro cultural está a la altura del entorno en el que se implanta, ya que son objetos posados en el agua que buscan generar la sensación de permanecer flotando. El manejo de la fachada vidriada, junto con la fachada opaca de hormigón, y las diferentes alturas de los volúmenes, generan el porte monumental necesario para posarse sobre un espejo de agua. Esta, es una extraordinaria pieza arquitectónica, que destaca por la modestia y delicadeza con que se resuelve
Respecto al programa que aloja y a las decisiones espaciales utilizadas en su organización, se puede especificar que este es un edificio que incluye tres auditorios, numerosos patios y múltiples estudios donde se impartan diferentes disciplinas, como: danza, música y arte. Todos estos los espacios tienen la misma importancia, no hay jerarquías, lo cual le otorga al edificio una gran funcionalidad. Además, esta configuración equilibrada, que provoca una sensación de armonía a quien lo recorre, opera a modo de contraste con las permeables divisiones de las habitaciones que generan la sensación de estar viviendo múltiples espacios al mismo tiempo.